El entrenador del FC Barcelona, Pep Guardiola, ha anunciado este viernes que dejará a final de temporada el banquillo del club de sus amores, en un duro anuncio para una afición que ha visto crecer al ''noi de Santpedor'' desde ser recogepelotas a todo un ídolo y capitán sobre el terreno de juego y que, como técnico, les ha dado un sinfín de éxitos y reconocimiento mundial hasta situar al Barça actual como el mejor de su historia.
El propio Guardiola niega esta afirmación, asegurando que solo con el tiempo se podrá valorar, pero los trece títulos que deja en su palmarés como técnico (podrían ser catorce con la Copa del Rey), en tan solo cuatro temporadas y habiendo logrado dos Ligas de Campeones, dos Mundiales de Clubes, el ''triplete'' y el que fue llamado ''sextete'' en su primer año y medio, sí que hacen de Guardiola el técnico más laureado del club.
Nombrado mejor entrenador del año en la gala del FIFA Balón Oro 2011, vio recompensado por parte del máximo organismo del fútbol mundial el esfuerzo realizado para llevar a su equipo del alma a volver a reinar tanto en Europa como en España, y es que salido de la fructífera Masia, ha llevado al Bar?a a lo más alto en un tiempo récord.
Ahora quizá sienta que ya no puede dar más, que puede que su tiempo haya acabado y que el Barça, que esta temporada ha dejado escapar la Liga BBVA y la Liga de Campeones, necesite un cambio, pero a corto plazo su marcha hará daño.
Y es que uno de los secretos de Guardiola para el éxito seguro pasa por canalizar el férreo e innato sentimiento ''culé'' y convertirlo junto al ''seny'' catalán en la guía que ha llevado al mejor FC Barcelona de la historia a ganar trece de los dieciocho títulos en juego desde que el técnico llegó al banquillo del primer equipo no hace todavía ni cuatro años, y aspira a despedirse con una nueva Copa del Rey el próximo 25 de mayo en el Vicente Calderón.
Modesto como pocos, el joven entrenador siempre alaba a sus jugadores y se quita el mérito que le corresponde. Es cierto que contar con el tres veces consecutivas Balón de Oro Leo Messi, o jugadores de la talla mundial de Xavi, Iniesta, Puyol o Dani Alves, por incluir a alguien no formado en casa, es algo fundamental para el éxito, pero han sido muchos los vestuarios que se han ido a pique por una mala dirección del técnico. Sin ir más lejos, el Barça de Ronaldinho y Rijkaard que el propio Guardiola se encargó de reflotar.
El propio Guardiola niega esta afirmación, asegurando que solo con el tiempo se podrá valorar, pero los trece títulos que deja en su palmarés como técnico (podrían ser catorce con la Copa del Rey), en tan solo cuatro temporadas y habiendo logrado dos Ligas de Campeones, dos Mundiales de Clubes, el ''triplete'' y el que fue llamado ''sextete'' en su primer año y medio, sí que hacen de Guardiola el técnico más laureado del club.
Nombrado mejor entrenador del año en la gala del FIFA Balón Oro 2011, vio recompensado por parte del máximo organismo del fútbol mundial el esfuerzo realizado para llevar a su equipo del alma a volver a reinar tanto en Europa como en España, y es que salido de la fructífera Masia, ha llevado al Bar?a a lo más alto en un tiempo récord.
Ahora quizá sienta que ya no puede dar más, que puede que su tiempo haya acabado y que el Barça, que esta temporada ha dejado escapar la Liga BBVA y la Liga de Campeones, necesite un cambio, pero a corto plazo su marcha hará daño.
Y es que uno de los secretos de Guardiola para el éxito seguro pasa por canalizar el férreo e innato sentimiento ''culé'' y convertirlo junto al ''seny'' catalán en la guía que ha llevado al mejor FC Barcelona de la historia a ganar trece de los dieciocho títulos en juego desde que el técnico llegó al banquillo del primer equipo no hace todavía ni cuatro años, y aspira a despedirse con una nueva Copa del Rey el próximo 25 de mayo en el Vicente Calderón.
Modesto como pocos, el joven entrenador siempre alaba a sus jugadores y se quita el mérito que le corresponde. Es cierto que contar con el tres veces consecutivas Balón de Oro Leo Messi, o jugadores de la talla mundial de Xavi, Iniesta, Puyol o Dani Alves, por incluir a alguien no formado en casa, es algo fundamental para el éxito, pero han sido muchos los vestuarios que se han ido a pique por una mala dirección del técnico. Sin ir más lejos, el Barça de Ronaldinho y Rijkaard que el propio Guardiola se encargó de reflotar.